domingo, 31 de julio de 2011

Aprender y enseñar en la cultura digital

Inés Dussel

El texto de esta autora se enfoca a la introyección de las nuevas tecnologías al sistema educativo, enfocándose principalmente en las perspectivas de los docentes.
Como presentación Inés Dussel nos dice que las nuevas tecnologías están presentes en nuestra vida cotidiana y tienen gran presencia en la educación pero existe un gran problema de acceso a ellas (a pesar de que su crecimiento es grande y con alto impacto) y es por eso que las políticas educativas y sociales deberían abarcar una distribución más equitativa del acceso a los nuevos medios digitales, así como en la formación del docente para obtener usos más complejos y significativos de los medios digitales.
El tema de las nuevas tecnologías están siendo objeto de estudio en varias investigaciones que giran en torno a cuatro tendencias: revisión conceptual sobre cambios didácticos, actitudes docentes sobre los cambios y expansión de las nuevas tecnologías, los usos y el cambio y la continuidad en las aulas.
Inés Dussel nos dice en el primer capítulo que existen dos posiciones en los docentes ante la introyección de las nuevas tecnologías en el aula: los que creen que son cambios radicales y los que consideran que las nuevas tecnologías son sólo modificaciones y un complemento a las prácticas pedagógicas ya existentes. Sin embargo, la autora se detiene a analizar los cambios en la organización pedagógica del aula, cambios en la noción de cultura y de conocimiento, así como de los cambios en la forma de producción de los conocimientos (nuevos sistemas de autoría).
En cuanto a los cambios en la organización pedagógica del aula, Dussel menciona que la introyección de las nuevas tecnologías al aula exige al docente el desarrollo de una metodología más flexible y una atención individualizada a cada alumno o grupo de trabajo. Hablando de los cambios de noción de cultura y conocimiento, nuestra autora menciona que las nuevas tecnologías de la comunicación se estructuran a partir del usuario y prometen acomodarse a los gustos del cliente a partir de su empatía emocional, con horizontes de plazos cortos y renovables y sin duda la principal diferencia entre el uso de las nuevas tecnologías y el conocimiento escolar es que las primeras son multimodales, combinando textos, imágenes y sonidos de maneras novedosas.

Otro gran cambio que relacionan con las nuevas tecnologías es el nuevo sistema de comunicación social que se presenta a partir de transmitir y compartir fotos con otros usuarios, así como el cambio en el archivo cultural, es decir, que el internet es percibido como un acervo cultural sin paragón en la historia humana. Es por la gran relevancia del internet que dentro de la educación se debe trabajar con sus limitaciones y exclusiones de cualquier archivo o colección de saberes, para mantener una visión crítica y sopesada de ellas.

En cuanto a los cambios de la producción de los conocimientos, Dussel nos menciona que las tecnilogpias digitales permiten un tipo de producción del conocimiento que se distingue del anterior por integrar modos de autoría distintos (videos, audio, texto) y permiten exhibir el trabajo en distintos soportes y plataformas para distintas audiencias así como de manera rápida y económica una autoría colectiva (como wikipedia).

Inés Dussel se enfoca a la cultura participativa que se manifiesta en la red y nos dice que se desarrolla una inteligencia colectiva donde cada persona puede contribuir algo, de tal manera que la idea de cultura participativa y de inteligencia colectiva sostiene la posibilidad de combinar conocimientos diversos y de generar respuestas más creativas y mejores que un conocimiento experto y que la incorporación de este estilo de conocimiento, así como de la producción multimodal deben presentarse en la enseñanza.

En el segundo capítulo "Los docentes frente a los cambios: de la amenaza a la celebración". Principalmente suele pensarse que los docentes muestran una actitud de resistencia frente a la cultura digital, debido a que los chicos aprenden que la prioridad fundamental de la educación formal no es volverlos competentes digitalmente sino protegerlos del contenido inapropiado y de predadores virtuales.

Por otra parte Roxana Cabello en su estudio conurbado encuentra que hay una asociación fuerte entre habilidad y aspectos actitudinales, es decir a menor temor, más exploración de otras posibilidades de uso, y por lo tanto se adquiere mayor habilidad para adquirir competencias.

En Recientes investigaciones muestran a los docentes en primer lugar como usuarios frecuentes de las nuevas tecnologías, en segundo lugar, con actitudes favorables hacia su introducción en el aula.

Por otra parte la encuesta de la Universidad Pedagógica indago en las prácticas que los docentes realizan con las computadoras.  Un 88% la usa para informarse y un 86% como herramienta de trabajo; además un 75% la usa como medio de comunicación con familiares o amigos y el 61% para estudiar.

Posteriormente también se llevó la encuesta encargada por la UPEA, la cual fue dirigida por Emilio Tenti. Al comparar los resultados de las encuestas, tanto de Universidad Pedagógica y la UPEA se obtuvieron resultados similares relacionados al uso de la computadora, sin embargo aparecen en menor medida los usos vinculados al entretenimiento. Aunque no deja de ser significativo que también se está realizando algún tipo de capacitación virtual.

La encuesta también relevo la percepción de los docentes sobre el equipamiento de sus escuelas y a la vez que el nivel de conformidad este mostrando una cierta resignación a la escasez. Aunque los docentes encuestados por la UPEA creen que las nuevas tecnologías ayudaran en la motivación de los estudiantes (63%), mejorarán su capacidad de aprender y su creatividad (46%)y menos del 40% creen que mejorará su actitud crítica frente al conocimiento, su concentración y el desarrollo de competencias de lectoescritura.

Los resultados enfocados sobre el impacto de las nuevas tecnologías son: el 79% cree que va a ampliar el acceso al conocimiento por parte de los alumnos, y un 73% , las define como “ recursos que facilitarán la tarea de los docentes en el aula”. Un 61% confía que mejorará la calidad de la enseñanza y los aprendizajes.
También es relevante que se perciba a las nuevas tecnologías como recursos que facilitan la tarea, y no, tal como se señaló, como dinámicas que introducen cambios radicales en la enseñanza y el aprendizaje.

Se hace evidente que los docentes de todos los niveles confían en forma pareja que mejorarán la calidad de la educación y los aprendizajes, es probable que los profesores del nivel medio estén más familiarizados con algunas discusiones sobre las nuevas tecnologías que los del nivel inicial, y tengan actitudes más positivas sobre sus efectos.

La encuesta  también indago sobre las actividades que los docentes realizan con las nuevas tecnologías vinculadas a su trabajo profesional. La mayor parte de los docentes las utilizan para planificar sus clases y organizar pruebas y guía de trabajo para los alumnos (83%). El segundo uso se enfoca en sistematizar la información, llevar planillas de asistencia, información de sus trabajos, entre otros aspectos. El 64% menciono que también la usan en forma considerable para comunicarse con otros colegas.

Por último es importante educar a los docentes en herramientas críticas que les permitan posicionarse en otro lugar que el de la fascinación con la maravilla tecnológica, y que les permita entender las reglas, jerárquicas, inclusiones y exclusiones en las que se fundan estas nuevas colecciones de saberes y esta nueva forma de producir contenidos.
En el tercer capítulo Dussel menciona que los usos más ricos de los nuevos medios como la creación de contenidos multimediales, la reflexión sobre la multimodalidad, el acceso a procedimientos más complejos de producción de conocimiento, la traducción y la navegación entre distintas plataformas aparecen más raramente en los usos que los docentes dan a las nuevas tecnologías, con lo cual se confirma que la brecha digital se está desplazando hacia los usos.
Muchos de los problemas y desafíos que hoy pueden señalarse en relación con el uso de los nuevos medios digitales son los mismos que pueden observarse en relación con la enseñanza más general: la fragmentación y la desigualdad del sistema educativo, la falta de relevancia de algunos contenidos y estrategias cognitivas, la dificultad para enseñar saberes más complejos, el desplazamiento de las funciones pedagógicas hacia otras de corte socializador-afectivo-asistencial, entre otros aspectos.
Uno de los grandes límites que se encuentran en los usos de las nuevas tecnologías es el escaso conocimiento por parte de los docentes aunque los que poseen las herramientas para trabajar con ellas dentro de clases mencionan que el tiempo es probablemente el mayor límite, apareciendo en los docentes preocupaciones que se relacionan con la conservación de archivos y del proceso del trabajo.
Dentro de este tercer capítulo, Dussel habla en torno al uso del programa Power Point y cita la crítica de un analista del mismo que menciona que el programa controla el contenido, militando contra la comunicación de ideas complejas a favor de punteos simplistas proyectadas en una pantalla, es decir, preocupación porque el programa promueva un pensamiento superficial, asociados a frases cortas y contundentes que no permiten argumentos más desarrollados ni narraciones que articulen distintos ítems.
Inés Dussel también nos plantea problemas con el uso de imágenes ya que las presentaciones solo permite utilizar imágenes que se adecuan al formato de pantalla de computadora, así como el tipo de imágenes que se seleccionan: las más convencionales, las más difundidas, o las primeras que aparecen en los buscadores.
Por otro lado, muchos docentes sostienen una epistemología del siglo XVIII que cree que hay una equivalencia inmediata entre ver y saber peor de igual manera se encuentra la posición en la que los docentes reconocen el valor de la interactividad y la rapidez como signos de época que los nuevos medios incorporan de manera mucho más eficiente. En tercer lugar, algunos docentes plantean una relación directa entre nuevas tecnologías, diversión y motivación, repitiendo una construcción muy particular sobre lo divertido y lo aburrido que viene dada desde las industrias culturales, sobre todo las que se dirigen al público infantil, que sostienen que nada de lo académico puede ser entretenido, o generar interés o curiosidad. En cuarto lugar encontramos que los docentes admiten que el entusiasmo de los alumnos ejerce un buen efecto sobre ellos mismo y los conecta con su trabajo de una manera más productiva y por último la identificación directa entre el nuevo curso y mejores aprendizajes, perspectivas que van relacionadas con el recordar más la intensidad emocional que nos suscita una experiencia que el contenido de la actividad.
Entre los usos de las nuevas tecnologías con la educación encontramos los blogs, los cuales los docentes usan como forma de intercambio con sus alumnos, aunque no sólo los docentes los utilizan sino también los padres para ejercer algún tipo de control o vigilancia sobre la escolaridad de sus hijos.
Sin duda, los blogs son fáciles de crear y actualizar y a diferencia de las páginas web el contenido de los blogs puede ser continuamente puesto al día, y también puede ser rápidamente comentado por los lectores o usuarios, permitiendo que la gente común pueda dar su perspectiva sobre el mundo por lo que algunas características de los blogs están siendo apropiadas por sitios comerciales como Facebook o MySpace.
Por otro lado, es evidente el temor que existe por el descontrol y el desborde en las redes sociales y en general en la participación en Internet por lo que se debe aprender a negociar desde otras reglas en el espacio escolar, en especial para evitar el “corte y pegue” se debe trabajar con el docente para que sea más atento para detectar la copia de páginas como el rincón del vago o monografías.com.
Inés Dussel termina este capítulo mencionando que muchos docentes, sin importar que no les agrade incorporar las nuevas tecnologías al aula, se deberá comenzar a evaluar su integración al aprendizaje del aula aunque no se sientan capacitados para este paso, mientras que otros, principalmente de inglés, matemáticas y ciencias, ya hacen uso de medios digitales para la evaluación por internet.
En el último capítulo de esta obra la autora abarca los cambios y continuidad en las prácticas de enseñanza y comienza mencionando que según Feldman existen dos grandes enfoques sobre la enseñanza. El primero la concibe como un proceso interactivo, cara a cara, donde el docente resulta un artesano individual que elabora resoluciones en la interacción directa con los alumnos a su cargo. El segundo define a la enseñanza como un sistema institucional, como una gran organización.
Para la escuela, el achicamiento de la brecha digital en el acceso a las nuevas tecnologías, el acercamiento de la escuela a las formas de producir la cultura en la vida actual, la renovación del entusiasmo con la enseñanza y el aprendizaje, son todos los elementos promovidos por el cambio tecnológico masivo y que traen una “bocanada de aire fresco” a un sistema educativo que venía alicaído.

Algunos docentes usan la Red para buscar recursos, y lo hacen de manera poco atada a sistemas de autoridades y reconocimiento científico y politico, sin mucha orientación sobre qué tipo de recursos serán útiles
Así que las nuevas tecnologías prometen la satisfacción inmediata del usuario, la adaptación a cada uno, y entrar y salir cuando uno quiere, que combinan mejor con el “para algunos” que con el “para todos”, siendo el “todos” una sociedad que se preocupa por la justicia y la igualdad en el acceso al conocimiento, y que pretende sostener una conversación y un marco de acciones compartidas.
Sin duda, este libro no sólo expone los problemas de Argentina sino de varios países que aún no logran incorporar las nuevas tecnologías a las actividades escolares, entre las cuales se encuentra México, por lo que la desigualdad está visible pues el acceso a las nuevas tecnologías aún es para algunos en vez de para todos tanto en cantidad como en calidad.